¿Habla Usted de la Gloria del Cielo?
Pida a una persona al azar en la calle si ellos piensan que son “buenas” y van a responder que lo más probable es que sí. Pregúnteles, si el cielo es real, si deben ir allí y lo más probable es que ellos también respondan que sí.
Si le preguntas a un cristiano bíblicamente informado por qué esa persona en la calle piensa así, especulo que obtendría una combinación de dos respuestas:
- La persona en la calle no entiende la maldad del pecado;
- La persona en la calle no entiende las verdaderas exigencias de la Ley;
Pero hay una tercera respuesta que yo creo que no se escucha de mucho:
- La persona en la calle no entiende la gloria del Cielo.
Ted Donnely me puso a pensar en esto después de leer un extracto de su sermón sobre el Cielo:
Hay una idea casi universal de que podemos merecer el cielo. Eso es lo que piensa la gente. Es bueno para ellos ir al cielo. Son dignos de ir al Cielo. Eso es en lo que todas las demás religiones están basadas. Esa es la esperanza del hombre o la mujer en la calle. Mis amigos, una visión de los cielos, una milésima de segundo de los cielos, haría de cualquier idea como absolutamente descabellada. Si pudiéramos ver por una fracción de segundo, la gloria del Cielo, nos daríamos cuenta de nuestra total incapacidad, indignidad, e inhabilidad de llegar alguna vez o estar presente en ese lugar. Es más pronto posible que un gusano aspire a ser un cirujano del cerebro, que un pecador, esperar trabajar su propio pasaje a la gloria.
Usted puede enfatizar el pecado y la ley en su predicación y sus conversaciones con los no cristianos, y eso es una buena cosa, pero ¿alguna vez lo escucharon hablar de la gloria del Cielo?
En la mente de muchos, el cielo está lejos de ser glorioso. Algunos tienen la impresión de los cristianos que el cielo se parece más a una sala blanca con un par de arpas donde vas a usar vestidos de blanco de hospital por la eternidad. Si ese es su imagen del cielo no es de extrañar entonces que no-cristianos creen que son dignos de entrar. Además, ¿realmente esperan que alguien quiera pasar la eternidad en un lugar que es similar a la sala de espera de un médico sin ningún tipo de revistas?
Alimento para el pensamiento. La próxima vez que usted esté hablando acerca de su fe, tenga en cuenta la gloria del Cielo.
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