martes, octubre 26, 2021

La Historia de Nuestra Esperanza

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La Historia de Nuestra Esperanza

Por John MacArthur

A muchos cristianos de hoy no les gusta hablar de escatología. Y a muchos pastores no les gusta predicar sobre ella. Existe esta actitud de, "Bueno - pre-milenial, post-milenial - realmente no importa".

Y los teólogos liberales hace mucho tiempo negaron la segunda venida de Jesucristo. Simplemente espiritualizaron todos los pasajes proféticos de la Escritura. Y los que no pueden espiritualizar, simplemente niegan su veracidad.

Sin embargo, la Escritura es muy clara sobre cuál es nuestra esperanza. Nuestra esperanza es que Jesús vendrá de nuevo. Este es el evento que culminará toda la historia de la humanidad: el Señor Jesucristo apareciendo visiblemente para revelarse a Su pueblo, para hacerlos como Él, y para llevarlos a la gloria eterna.

Quiero exponer cuatro etapas de la segunda venida de Jesús, contando la historia de este día que esperamos, para que podamos entender exactamente cuál es nuestra esperanza como cristianos.

1. Él vendrá por sus santos.

14 Porque si creemos que Jesús murió y resucitó, así también traerá Dios con Jesús a los que durmieron en él.

15 Por lo cual os decimos esto en palabra del Señor: que nosotros que vivimos, que habremos quedado hasta la venida del Señor, no precederemos a los que durmieron.

16 Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero.

17 Luego nosotros los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor.

(1 Tesalonicenses 4:14-17)

Esto es lo que llamamos el rapto. Es el momento en que Cristo aparecerá -transformando a los santos que estén vivos en ese momento y resucitando a los santos que ya hayan muerto- y llevándolos a estar con Él.

2. Él aparecerá con Sus santos.

Después del rapto, habrá un tiempo de gran tribulación en la Tierra. Esto se describe cuidadosamente y en detalle en Mateo 24 y en Apocalipsis 6-19. Y al final de este período, el Señor aparecerá de nuevo, esta vez viniendo con Sus santos en lugar de por ellos. Juan nos da una descripción de este momento:

11 Entonces vi el cielo abierto; y he aquí un caballo blanco, y el que lo montaba se llamaba Fiel y Verdadero, y con justicia juzga y pelea.

12 Sus ojos eran como llama de fuego, y había en su cabeza muchas diademas; y tenía un nombre escrito que ninguno conocía sino él mismo.

13 Estaba vestido de una ropa teñida en sangre; y su nombre es: EL VERBO DE DIOS.

14 Y los ejércitos celestiales, vestidos de lino finísimo, blanco y limpio, le seguían en caballos blancos.

(Apocalipsis 19:11-14)

Aquí, Jesús y sus redimidos aparecen juntos y regresan a la Tierra para causar estragos en el juicio.

3. Él reinará a través de Sus santos.

Una vez que Satanás sea atado y el reino de mil años sea inaugurado, Juan describe esta escena:

Y vi tronos, y se sentaron sobre ellos los que recibieron facultad de juzgar; y vi las almas de los decapitados por causa del testimonio de Jesús y por la palabra de Dios, los que no habían adorado a la bestia ni a su imagen, y que no recibieron la marca en sus frentes ni en sus manos; y vivieron y reinaron con Cristo mil años. (Apocalipsis 20:4)

Los que somos fieles a Cristo gobernaremos con Cristo en su reino. En ese tiempo, los hijos de Dios se manifestarán gloriosamente, revelando su verdadera condición. Por primera vez el mundo verá quiénes son realmente los creyentes. Y los verán en el poder milenario. Los verán en la gloria celestial cuando regresen a reinar con Cristo.

4. Él morará entre sus santos.

Después de que los mil años terminen y Satanás sea finalmente derrotado por última vez, viene la etapa final que conocemos por las Escrituras:

1 Vi un cielo nuevo y una tierra nueva; porque el primer cielo y la primera tierra pasaron, y el mar ya no existía más.

2 Y yo Juan vi la santa ciudad, la nueva Jerusalén, descender del cielo, de Dios, dispuesta como una esposa ataviada para su marido.

3 Y oí una gran voz del cielo que decía: He aquí el tabernáculo de Dios con los hombres, y él morará con ellos; y ellos serán su pueblo, y Dios mismo estará con ellos como su Dios.

(Apocalipsis 21:1-3)

Después del rapto, la aparición y el reino, Dios el Padre y Dios el Hijo morarán con los santos para siempre.

Así es como termina la historia. Y saber esto es importante, amigos. Vivimos a la luz de esta realidad. Jesús va a aparecer. Este mundo no ha visto lo último de Jesús.

La gente me pregunta: "¿Crees que estamos viviendo cerca del regreso de Cristo?" Sé que hoy estamos más cerca que ayer. No sé cuándo será, pero sé que puede ocurrir en cualquier momento (Lucas 12:40). Así que tenemos que estar preparados todo el tiempo. Y vivir con la esperanza de su inminente venida marca una tremenda diferencia.


Este artículo está basado en un sermón que el Dr. MacArthur predicó en 2003, titulado “La Esperanza Purificadora, 2ª parte.”

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