Evangelismo en el Trabajo

Por Ashok Nachnani

Al crecer la oposición cultural hacia el cristianismo, ¿cuál es su efecto sobre el evangelismo en el trabajo? ¿Es usted más fiel o tiene más miedo?

Difícilmente se le podría culpar por ser más temeroso. El rápido avance del liberalismo social y las políticas de recursos humanos, promoviendo lugares de trabajo "tolerancia" sólo exacerban los dos miedos que comúnmente citamos por no compartir el Evangelio con nuestros compañeros de trabajo: el miedo al daño social y el temor a las repercusiones de carrera, como la pérdida de puestos de trabajo o de profesión.

El Evangelismo siempre ha sido difícil. Si hay algo nuevo acerca de nuestros desafíos de hoy, es cuan envalentonada parece ser la oposición. Los no cristianos solían decir “Cada uno con lo suyo.” Ahora ellos tienen la misma probabilidad de acusarnos de estupidez (“En serio, ¿usted no cree en la evolución?”) O intolerancia odiosa (“¿Cómo te atreves a decir que la homosexualidad es un pecado?”). Los empleadores hacen cada vez más rigurosos controles de antecedentes de medios sociales antes de tomar decisiones de contratación y promoción. ¿Cuánto falta para que las empresas que tienen miedo de acoso laboral y discriminación descarte al cristiano más visible por alguien que haga menos olas?

A pesar de todo esto, estoy muy agradecido por los hermanos que temen más a Dios que al hombre y compartieron el evangelio conmigo. Mi propia fe es el fruto de la evangelización en el lugar de trabajo.

PERDIDO Y ENCONTRADO EN EL LUGAR DE TRABAJO

Hace doce años, yo era un investigador en una firma consultora de tamaño medio en Washington, DC. Yo era un hindú confiado, autosuficiente y profesionalmente prosperando. No habría asumido que estaba espiritualmente incierto. Francamente, yo no sabía que estaba espiritualmente incierto. Lo que no era, es ser un tipo que estaba buscando activamente Cristo.

Introduzco a mi colega cristiano Hunter. Bien conocido y muy querido por toda la oficina, Hunter era un tipo de ventas de alto rendimiento con una gama de intereses. Alguien me dijo: "Él es un cristiano, ya 'saben." Ninguno de nosotros sabía a ciencia cierta lo que quería decir, pero ambos creían que era suficientemente relevante como para añadir una idea, “Oh.”

Yo sabía que Hunter no encajaba en el molde de un cristiano que me había construido mentalmente. Los cristianos eran agradables, pasado de moda, hipócritas, melodías de una sola nota. Hunter no era eso. Así que empecé a mirarlo.

Nos hicimos amigos. Pasamos tiempo juntos y hablamos de una serie de temas: Simpsons, El Señor de los Anillos, Cristo, Krishna, café, trabajo. Mientras que el Señor usó a Hunter a perseguirme, nunca me sentí como un proyecto, sólo un amigo. Puesto que sólo Dios puede hacer, providencialmente dispuso a Hunter para estar allí al mismo tiempo que Dios orquestó una crisis espiritual en mi vida. Y el dio a Hunter sabiduría y audacia para decir la verdad en mi vida cuando más lo necesitaba.

COMPORTAMIENTOS DE UN EVANGELISTA EN EL TRABAJO

Aunque joven en la fe en el momento, hay mucho sobre el ejemplo de Hunter que cualquier creyente puede aplicarse en un ámbito laboral.

1. Poner a Cristo en la Mesa

En primer lugar, poner a Cristo en la mesa. Debido a que puede ser raro encontrar cristianos en el lugar de trabajo, es esencial que la gente en su oficina conozcan que usted es un seguidor de Cristo. De esta forma puede estar disponible a los creyentes más débiles y un ejemplo para los no creyentes. Fue un colega no cristiano que me habló de la fe de Hunter. Es evidente que no deberíamos hacer esto desagradable o irresponsablemente, pero haciendo un recuento de su fin de semana, describiendo el estudio de la Biblia en el que usted está, o compartir cómo orar por los demás, la gente pronto lo sabrá.

2. Trabajar con Excelencia

En segundo lugar, trabajar con excelencia. Al poner a Cristo en la mesa, espere ser estudiado por sus compañeros como yo estudiaba a Hunter. Trabaje de una manera que refleja la creatividad, el propósito y la bondad de Dios. Demuestre fidelidad e integridad. Trabaje “sin murmuraciones ni quejas” (Fil. 2:14). Sométase a las autoridades, y sirva con humildad.

Esto en sí mismo no es evangelización, pero el contenido de nuestras vidas en el trabajo debe fortalecer, no debilitar, el contenido del mensaje del evangelio que compartimos.

3. Amen A Sus Compañeros

En tercer lugar, ame a sus compañeros. Invierta en las amistades con los no cristianos en su lugar de trabajo, no superficialmente como “proyectos,” sino con amor como los hechos a imagen de Dios. No hay que subestimar la importancia de la confianza. Tenga en cuenta que fue un año y medio después de que Hunter y yo nos conocimos y estudiamos juntos la Biblia y Dios me dio oídos para el evangelio.

Utilice su hora de almuerzo estratégicamente. En cuanto pueda, haga un uso generoso de la hospitalidad, donde usted puede compartir su vida con un colega fuera de la oficina y de la habitual charla y bromas de oficina.

4. Prepárese para Evangelizar

En cuarto lugar, prepárese para evangelizar. Tan tonto como esto puede sonar, asegúrese de saber cómo explicar fácilmente el evangelio. Practique si es necesario.

Cuando el Señor da la oportunidad, usted no quiere que su voz interior le grite por no ser claro –quiere que su mente este libre para escuchar a su colega y lo que están luchando por entender. Después de todo, es el evangelio el que salva, no nuestro ingenio rápido y la fuerte comprensión de la apologética. Alabo a Dios por la claridad de Hunter, la valentía y la confianza en el poder del Evangelio.

5. Orar

En quinto lugar, orar. Oren por sus colegas con regularidad. Ora por buenas oportunidades para compartir el evangelio. Oren por crecimiento en la valentía. Ore para que Dios sea grande y el hombre sea pequeño –todos somos culpables de mezclar ambos.

E invite a los hermanos y hermanas en la iglesia a orar también. Hunter me dijo más tarde que el grupo de estudio bíblico de sus hombres estaba orando por mí desde el momento en que le pregunté acerca de su fe cristiana.

UN LLAMADO A LA FIDELIDAD

En los lugares de trabajo se vuelven más hostiles al cristianismo, estas prácticas básicas serán aún más esenciales. El Señor ha tenido la gentileza de responder a mis oraciones por muchas buenas oportunidades y palabras para hablar. Ser conocido como un cristiano, viviendo mi fe profesional e interpersonal, y amar a mis colegas más como portadores de la imagen de Dios me ha ganado la oportunidad de hablar abiertamente de mi fe. Y, en su maravillosa gracia, Dios me ha elegido para usarme para traer un colega a la fe.

Debemos esperar que el Señor contesta nuestras oraciones y nos conceda la oportunidad de hablar de Cristo, para orar por la audacia. Dios te ha puesto en donde está con un propósito.

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Ashok Nachnani es un anciano en la Primera Iglesia Bautista en Durham, Carolina del Norte, y un ejecutivo de estrategia de una empresa de gestión de energía multinacional.