Priorizando la Asistencia a la Iglesia
Matt Manry
Vamos a enfrentar los hechos. Hoy en día, muchos cristianos no piensan que asistir a la iglesia sea tan importante.. En el pasado, los cristianos creían que activamente que ser parte de un cuerpo de la iglesia era absolutamente necesario para la fe de uno. Solía haber un entendimiento en las familias cristianas que a menos que uno estuviese gravemente enfermo o existiera una emergencia familiar, nunca jamás faltarían a la iglesia. Entonces, ¿qué ha cambiado y ha causado a tantas personas ver a la iglesia como un bien desechable en lugar de como una parte intrínseca de la vida espiritual?
Por qué no Asistimos a la Iglesia: Un Trabajo de 40 Horas a la Semana, Pero no Hay Tiempo para Dios
El pastor Kevin DeYoung está en lo correcto. Nuestras vidas son en realidad “locamente ocupadas.” No hay ninguna duda al respecto. Si usted es un estudiante universitario, una pareja de recién casado, o tiene una familia de siete hijos, vivimos en una época donde la mentalidad es simple: vaya, vaya, vaya! Esta es una de las razones principales de porque la asistencia a la iglesia es vista como opcional. La mayoría de la gente trabaja 40 horas a la semana en los trabajos de los Estados Unidos, por lo que una vez que el fin de semana se acerca, la mentalidad de descanso y recuperación comienza. Créeme, lo entiendo. Todo el mundo quiere un poco de tiempo de inactividad. Pero, ¿por qué pensamos que el descanso y la recuperación deben realizarse fuera de los confines de la casa de Dios?
Recientemente, Trevin Wax escribió un artículo titulado: “¿Es Usted un Asistente a Tiempo Parcial?. Usted Puede Ser Sorprendido .” Wax explica varias razones de por qué la gente se pierde la iglesia en la sociedad actual. Hay 52 domingos al año. Si sólo asiste a los servicios del domingo 25-30, usted es un asistente a la iglesia a tiempo parcial.¡Felicitaciones!
¿Puede reconocer lo que es claramente malo en esto? Nuestros puestos de trabajo, que por supuesto tenemos que tener para poder mantenernos a nosotros mismos y nuestras familias, son vistos como necesidades absolutas, mientras que la asistencia a la iglesia es vista simplemente como una actividad prescindible. Hermanos y hermanas, esto no es como debe ser. Por supuesto, la mentalidad de sólo asistir a la iglesia, conseguir su boleto de asistencia a la iglesia perforado, es absolutamente equivocado también. Los pastores y líderes de la iglesia deben predicar contra esta mentalidad también. Sin embargo, piense en esto por un segundo. Al igual que se reunirse con su familia biológica, ¿no debe usted también desear reunirse con su familia espiritual?
Por qué necesitamos la Iglesia: un caso bíblico
Conozco los argumentos que van a ser levantado sobre lo que he dicho hasta ahora. La gente va a decir: “¿De verdad crees que asistir a una iglesia local, ir a su edificio, y hacer esto una o dos veces a la semana es lo que sugiere la Biblia?” Bueno, sí y no. Kevin DeYoung explica: “Yo sé que somos la iglesia y no vamos a la iglesia (bla, bla, bla), pero al ser quisquilloso con nuestro lenguaje no cambia la exhortación de Hebreos 10:25.” No podría estar más totalmente de acuerdo.
La comunión con vuestra familia espiritual es una señal de maduración en la fe como un discípulo. Hebreos 10:25 dice: “no dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre, sino exhortándonos; y tanto más, cuanto veis que aquel día se acerca.” ¿Realmente hemos llegado a ser tan “nueva-era” en nuestro pensamiento que ahora creemos que hemos madurado más allá de la necesidad de asistir a la iglesia? Señor, que no sea así.
Asistencia a la Iglesia Motivada por el Evangelio
No hay duda de que lo que tenemos que recuperar en la vida de los cristianos de hoy es una asistencia a la iglesia Evangelio-motivados.¿Qué podría ser similar? Bueno, en mi opinión, es lo que demuestra el hecho de que cuando la iglesia se reúne en el día del Señor, se proclama el evangelio, se medita en el evangelio, y practica el evangelio. De esta manera, las vidas empezarán a cambiar fundamentalmente. Realmente es así de simple.
Cuando el evangelio se encuentra en el centro, nuestra atención cambia. Ya no vemos la asistencia a la iglesia como algo que sólo tenemos que marcar, sino como una parte intrínseca de nuestra vida espiritual. En lugar de servir al dios de la individualidad, estaremos sirviendo a Dios de las Escrituras. El evangelio cambia todo. Sin embargo, primero tenemos que dejar que el Evangelio cambie nuestras bajas perspectivas de la iglesia, y reconocer que la casa del Señor es absolutamente vital para la vida cristiana: para la vida de un discípulo maduro. ¿No debería la buena noticia de que Jesucristo murió por nuestros pecados, motivarnos lo suficiente como para entrar en la casa de Dios los domingos? Yo diría que sí.
Todos estamos en diferentes puntos de nuestro caminar espiritual con el Señor. No importa en qué punto está usted en su viaje, espero que usted llegue a ver la importancia de asistir a la iglesia. No seas tan narcisista y auto-consumido para pensar que usted no necesita el cuerpo de Cristo. Eso es simplemente una señal de inmadurez espiritual y una mentira directa del Diablo.
Yo no estoy tratando meter culpa a nadie para asistir a la iglesia con regularidad tampoco. Sin embargo, estoy emitiendo un desafío para aquellos que se consideran a sí mismos cristianos. Si usted se considera ser una parte de la esposa de Cristo (Apocalipsis 19:7-9, 21:02), digame ¿por qué separarse del cuerpo de Cristo (Rom. 12:5; 1 Cor 10:17)? Lógicamente, eso no tiene sentido en absoluto.
Así que los cristianos, viven en la luz del hecho de que usted ha sido redimido y no tiene que ganar su aceptación ante Dios a través de su asistencia a la iglesia. La comunidad de Cristo te necesita porque no puede funcionar sin la totalidad de sus partes del cuerpo. Esta no es condenación, sino más bien una exhortación.. Asistir a la iglesia es una bendición que no se debe dar por sentado.
1 comentario:
Asistir a la Iglesia es vital para nuestra vida espiritual y cotidiana, es aquí en donde uno tiene libertad de conectarse con Dios a través del espíritu Santo sin interrupciones ni perturbaciones, ademas el hecho de alabar y cantar a nuestro Dios reconforta sin duda nuestro ser dándonos una saciedad de paz y bienestar liberando las tensiones de nuestra vida cotidiana; Vengan a mí todos los que están afligidos y agobiados y yo los alivié. Carguen sobre ustedes mi yugo y aprendan de mí, porque soy paciente y humilde de corazón y así encontrarán alivio, porque mi yugo es suave y mi carga liviana”.Mateo 11, 25 - 30
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