Gnosticismo Transexual

Por Jesse Johnson

Gnósticos eran una secta del siglo primero que enseñó que la materia no importaba. Más precisamente, sostuvieron que nuestros cuerpos físicos eran vulgares y por lo tanto carecían de valor, mientras que nuestro estado espiritual interno representaba la verdadera realidad. Ellos enseñaron esto porque Jesús era el ser espiritual perfecto, él no tendría ni siquiera un cuerpo físico. Si él hubiera caminado en la playa, no habría dejado las huellas de sus pisadas (que, de ser cierto, podría cambiar radicalmente muchos carteles cristianos).

Creo que esto se entiende como un cartel de derechos-LGBT (Lesbiana-Gay-Bisexual-Transexual), pero también se puede leer como un argumento en contra de la parte T de esa sigla.

El movimiento transexual moderno pretende diferenciar entre un sexo biológico y el concepto de género. Su sexo es lo que se nace, mientras que el género es una construcción social impuesta sobre ti al nacer por una sociedad que (erróneamente) asume que su sexo está relacionado con su género.

Este movimiento tiene como objetivo la destrucción de esa conexión. Ahora permítanme ser rápido para decir que el movimiento carece totalmente de lógica y cualquier tipo de verdad proposicional que es remotamente plausible. Considere: al afirmar que el sexo y el género no están conectados, también afirman que algunas personas pueden nacer con el sexo "equivocado" (por lo tanto una operación de cambio de sexo). Por ejemplo, pretenden que una persona puede nacer biológicamente varón, pero tener un género interno de mujer, y por lo tanto tiene el cuerpo "equivocado".

Pero si el género no está conectado el sexo, primeramente, entonces, en qué sentido se puede decir a alguien que tenga un cuerpo "equivocado"? Si el género tiene que ver con las construcciones sociales, ¿por qué cambiar el cuerpo de una persona para que coincida con el género interno de uno? No tiene ningún sentido lógico. (En realidad, permítanme expresarlo de otro modo: tiene tanto sentido como decir que el género no tiene nada que ver con el matrimonio.)

La semana pasada escribí sobre este tema obligada sobre los estudiantes de primaria en el área de Washington DC, pero con segurodad llegará a un distrito escolar cerca de usted. La versión corta: la Junta Escolar del Condado de Fairfax siguió a una recomendación del Departamento de Educación y aprobó una medida que permitiría a los estudiantes utilizar el baño al cual ellos identifiquen como género, independientemente de su sexo biológico. Usted tal vez ha oído hablar de el gimnasio donde el varón que se identificó como mujer estaba usando el vestuario de las mujeres , o la universidad donde el estudiante varón estaba desnudo en el vestuario de las mujeres . El condado de Fairfax quiere traer eso a nivel de la escuela primaria.

¿Cómo debemos responder a esto?

Entender que la motivación es rebelarse contra Dios, y obligar a que aprueben su rebelión.

Si una persona va a silenciar a Dios, tienen que cauterizar su conciencia, y cortar cualquier lazo obvio que tengan a su creador. Porque Dios es el que diseñó los sexos (Mateo 19:4; Gen 1:27 ), una rebelión a pleno pulmón contra Dios va a tener que contener un rechazo del plan de Dios para el sexo. “¿Quién exactamente piensa Dios que es, si piensa que me puede decir que soy un hombre o una mujer!?”

Pero la persona que mutila su cuerpo para ponerla en conformidad con su identidad de género interno todavía tiene uno de los principales obstáculos en su búsqueda para silenciar a Dios: usted. Necesitan a aquellos a su alrededor para aceptarlos, aprobarlos, y simplemente que no les recuerden que lo que están haciendo es pecado. De hecho, exigen que usted lo apruebe (Romanos 1:32). Con este fin, “cuya gloria está en su vergüenza” (Fil 3:19), mientras que " arrojan como espuma su propia vergüenza[" (Judas 13).

Como cristianos, debemos por lo menos abstenernos de la aprobación que la persona dese desesperadamente. Debemos ser las pocas voces que queden diciendo: “¿No habéis leído que aquel que los creó, desde el principio los hizo varón y hembra” (Mateo 19: 4).

Comprenda la diferencia entre sexo y género:

He aquí cómo decir la diferencia: la gente tiene sexo, y los sustantivos tienen género. Un taco es masculino, y una tostada es femenino, y esto no tiene nada que ver con las partes biológicas que tienen. Este es ciertamente un concepto abstracto en español, ya el nuestro tiende a ser un lenguaje de género neutro, pero si recuerda el francés o español o latín de la escuela secundaria, es probable que recuerde que el género es un concepto que es gramatical, no biológico.

A diferencia del género, el sexo es biológico. Hay cromosomas involucrados, y partes físicas correspondientes. Con el perdón de los gnósticos transexuales de nuestro tiempo, el sexo no es una construcción social, sino una realidad física. Mientras que en algunos casos hay personas que nacen con un defecto biológico (en los que su órgano sexual no coincide con su sexo biológico), estos ejemplos muy raros demuestran que en un mundo caído todas nuestras capacidades físicas están sujetas a la corrupción. En otras palabras, la existencia de la ceguera congénita no demuestra que la vista es una construcción social.

Es cierto que existen algunas construcciones sociales de género: los chicos juegan con armas de fuego, y las niñas con las muñecas. Pero un niño que juega con muñecas no significa que él tiene las partes físicas equivocadas, y ciertamente no debe entonces usar el baño con las niñas. Los baños corresponden al sexo, no su preferencia de juguete infantil.

El sexo es binario (usted o bien tiene un cromosoma masculino, o no lo tiene), y de la manera en que el género se conecta a la gente, está igualmente conectada al sexo.

Sea una voz de la razón:

Los cristianos tienen que ser equilibrados y razonables en conversaciones sobre estos temas. Recuerde que estamos tratando con personas seriamente heridos, muchos de los cuales están seguros de que la fuente de su dolor interno es que su género autopercibido no coincide con las partes sexuales que Dios les dio.

Ser capaz de explicar cómo siendo que todos somos pecadores caídos, y como hijos de Adán todos tenemos nuestra verdadera identificación en el segundo Adán. Rehúse aprobar el mal (Juan 12:43), y sea la única persona que está dispuesta a identificar claramente lo que Dios dice sobre el tema del sexo. Debemos renunciar a las cosas ocultas de vergüenza (2 Corintios 4:2), negarse a glorificar a los males sexuales de nuestra cultura (Efesios 5:12).

Mientras que nuestra cultura rechaza la ciencia, tratando de separar el género de sexo, debemos ser capaces de explicar cómo la verdad de la Escritura se ajusta a lo que vemos en este mundo (Mateo 19: 4). No importa si estamos en el lado ganador o perdedor en la batalla de la opinión pública; lo único que importa es si estamos en el lado correcto de la verdad, sazonada con amor.