Cómo Criticar Un Predicador

Por David Murray

Así que ha escuchado un sermón y no está contento. Siente que el predicador lo hizo muy mal, ya sea en su interpretación, sus palabras, sus modales, su longitud, ó lo que sea.

¿Y ahora qué?

Bueno, yo no voy a decirle exactamente qué palabras usar. Simplemente voy a darle diez preguntas para hacerse que espero produzca las palabras y la manera correcta de decirlas si alguna vez tiene que ofrecer una crítica a un predicador.

1. ¿Lo ha entendido bien? Dele al predicador el beneficio de la duda. Pregúntese a usted mismo: “¿Estoy interpretándolo de la peor manera posible?” Quizás consúltelo con su esposo o esposa, “¿He oído esto correctamente ...?”

2. ¿He dado el tiempo suficiente? Es raramente sabio o útil reaccionar de inmediato a lo que se predica. Sus pasiones serán elevadas, pero también lo hará el predicador. No es una buena receta.

3. ¿Ha orado al respecto? ¿Ha tomado tiempo para pedir: “Señor, muéstrame si estoy en lo correcto aquí. Muéstrame si este es lo suficientemente importante como para seguir adelante. Ayúdame a ver si esto es una cuestión primaria o secundaria?”

4. ¿Es esto sólo de preferencia personal o principio bíblico? Todos tenemos nuestras verdades favoritas y nuestros estilos favoritos de predicación. ¿Se trata de doctrinas de la Biblia y práctica bíblica o sólo es mi tradición o preferencia?

5. ¿He pensado en el mejor momento y la manera de comunicarlo? Ni domingo o el lunes son días buenos para acercarse a un pastor acerca de los problemas con su predicación. El domingo, la adrenalina sigue bombeando. El lunes, él es plano como un panqueque. Mejor no haga esto en público delante de los demás, sino en privado. Hágalo en un ambiente tranquilo, apacible, y de manera amorosa. Según lo he aprendido, hágalo personalmente en lugar de por escrito o por correo electrónico.

6. ¿Estoy haciendo esto por el motivo correcto? ¿Es evidente mi amor y respeto? Si es constructiva y con el fin de servir al pastor, entonces, la crítica puede ser increíblemente útil.

7. ¿Estoy enfocado o simplemente estoy lanzando piedras? Nunca diga: “Y ya que estamos en ello, el sermón del año pasado ... y aquí está otra cosa ...”

8. ¿He considerado la posibilidad de que yo pueda ser uno de los muchos otros que hacen lo mismo? Usted puede ser la gota que colme al predicador.

9. ¿Estoy dispuesto a escuchar su explicación y reconocer que estaba equivocado?? ¿Estoy realmente abierto a ser corregido?

10. ¿Está en el contexto de la apreciación expresada anteriormente? Es mucho más fácil de escuchar las críticas cuando se sabe que la persona tiene un buen corazón y quiere crecer y prosperar. La crítica reiterada puede ser mucho más fácilmente ignorada o rechazada.