La Carta del Pastor Saeed a Su Hija

Saeed Abedini, el pastor estadounidense encarcelado en Irán, escribe una carta alentadora y hermosa a su hija en su octavo cumpleaños.

Pastor Saeed Abedini escribió esta carta a su hija por su octavo cumpleaños, que fue el 12 de septiembre. Este es el tercer cumpleaños de Rebekka que el Pastor Saeed se ha perdido mientras languidece en una prisión iraní por su fe.

Mi muy querida Rebekka Grace:

¡FELIZ CUMPLEAÑOS NO. 8!

Estás creciendo muy rápido y cada vez más bella cada día. Alabo a Dios por Su fidelidad a mí todos los días a medida que observo desde la distancia a través de los muros de la prisión y ver imágenes y escuchar historias de cómo estás creciendo tanto espiritual como físicamente.

¡Oh, cuanto ansío verte!.

Sé que preguntas por qué has orado tantas veces por mi regreso y sin embargo aún no estoy en casa. Ahora hay una gran POR QUÉ en tu mente estás pidiendo: por qué Jesús no responde a tus oraciones y las oraciones de toda la gente de todo el mundo que ora por mi liberación y para que yo regrese a casa contigo y con nuestra familia.

La respuesta al ¿POR QUÉ? Es un QUIEN. ¿QUIEN está en control? El SEÑOR JESUCRISTO está en control.

Yo deseo que puedas aprender lecciones importantes durante estos tiempos difíciles. Lecciones que se llevan ahora y por el resto de su vida. La respuesta al ¿POR QUÉ? es QUIEN. La confusión de "¿Por qué todo esto pasó?" Y "por qué tus oraciones no son respondidas aún" se resuelve con la comprensión de QUIEN está en control ...el SEÑOR JESUCRISTO, ¡nuestro DIOS!

Dios está en control de todo el mundo y todo lo que está sucediendo en el mismo es de su buena voluntad, para Su gloria, y obrará para nuestro bien (Romanos 8:28). Jesús me permite retenerme aquí para Su gloria. Él está haciendo algo dentro de cada uno de nosotros y también afuera en el mundo. Las personas mueren y sufren por su fe cristiana en todo el mundo y algunos pueden preguntarse ¿por qué? Pero usted debe saber la respuesta de PORQUE es QUIEN. Es por Jesús. Él es digno del precio. Y Él tiene un plan para ser glorificado a través de nuestras vidas.

Quiero que leas el libro de Habacuc. Tenía la misma pregunta que tú. Pero ver que el Señor le respondió en Habacuc 2:3 “Porque es aún visión para el tiempo señalado; se apresura hacia el fin y no defraudará. Aunque tarde, espérala; porque ciertamente vendrá, no tardará.” Mami y yo siempre tenemos grandes deseos de servir a Jesús y tenemos una gran visión que se utilizará para Su Reino y para Su gloria. Así que hoy tenemos que pagar un costo porque Dios, que nos creó, nos llamó a eso.

Y por eso quiero que sepas que la respuesta a todas tus oraciones es que Dios está en control, y él sabe mejor que nosotros lo que Él está haciendo en nuestras vidas y en todo el mundo.

Por lo tanto declaramos como Daniel y sus amigos Sadrac, Mesac y Abed - nego lo hicieron en Daniel 3: 17 a -18!

Ciertamente nuestro Dios a quien servimos puede librarnos del horno de fuego ardiente; y de tu mano, oh rey, nos librará. Pero si no lo hace, has de saber, oh rey, que no serviremos a tus dioses ni adoraremos la estatua de oro que has levantado.

Y aprendemos y declaramos como Habacuc lo hizo que incluso si no conseguimos el resultado que estamos buscando, Dios sigue siendo bueno y VAMOS a alabar Su Santo Nombre.

Habacuc 3:17-19

Aunque la higuera no eche brotes, ni haya fruto en las viñas; aunque falte el producto del olivo, y los campos no produzcan alimento; aunque falten las ovejas del aprisco, y no haya vacas en los establos, con todo yo me alegraré en el Señor, me regocijaré en el Dios de mi salvación. El Señor Dios es mi fortaleza; El ha hecho mis pies como los de las ciervas, y por las alturas me hace caminar.

Entonces, mi querida hija amada Rebekka Grace, le pido a Dios que me traiga de vuelta a casa pronto. Pero si no, seguiremos cantando juntos como Habacuc hizo ALELUYA, ya sea separado por las paredes de la prisión o juntos en casa.

¡Así que, vamos que papá te oiga cantar una fuerte Aleluya que pueda escucharse hasta aquí en la cárcel!

Estoy tan orgullosa de ti mi hija valiente dulce. Gloria a Dios para siempre, Amén.

Besos y Bendiciones,

Papá