El Ministerio En Un País Cerrado
Por Jesse Johnson
Clint y yo hace poco volvimos de un viaje ministerial a un país en el Himalaya que está oficialmente cerrado al evangelio. El gobierno de ese país no reconoce el cristianismo, y los creyentes son perseguidos activamente. Hay cristianos en la cárcel, y los líderes de los monasterios budistas se sabe que abaten a aquellos que se sospechan ser cristianos.
A pesar de la oposición, hay una iglesia de primera generación allí. De los cientos de creyentes que conocimos, pocos fueron criados en un hogar cristiano. Cuando una persona llega a la fe en Cristo, reciben un nombre, un nuevo nombre bíblico. Por lo tanto, la gente en la iglesia puede reconocer otros creyentes, simplemente por su nombre. Era una imagen preciosa de la fe y de la Iglesia como una familia.
La iglesia está, obviamente, enfrentando desafíos. Hay cero pastores de seminario capacitados en todo el país, ni tampoco hay pastores a quienes se les paga por su ministerio. Todo el esfuerzo es conducido por pastores laicos, que pasan gran parte de su tiempo de trabajo a sus trabajos habituales, seguidos de visitar otros creyentes en la cárcel. La Biblia ha sido traducida a la lengua principal del país, pero no se publica. El resultado es que utilizan una traducción del dialecto de un país vecino, que es lo suficientemente cercana como para transmitir el significado, pero lo suficientemente lejos que desarrolla una gran cantidad de confusión.
Sin embargo, los creyentes de esta nación han sido protegidos de gran parte de lo que ha dañado el evangelicalismo en Occidente. No hay católicos en el país (que sepamos), y el movimiento carismático está apenas empezando a influenciar. Todos los creyentes son bautistas, premileniales y evangélicos –y llegaron a esas posiciones sin ninguna influencia real que no sea las Escrituras.
Clint y yo pudimos asistir a una reunión de la mayoría de líderes de la iglesia en el país. Enseñamos sobre las marcas de un líder piadoso, algunos conceptos básicos de la santificación, el gozo del cielo, y perseverar a través de las pruebas. Clint escribió más sobre esto aquí .
El objetivo de nuestro viaje era animar a los líderes de la iglesia, y evaluar la posibilidad de algún tipo de formación pastoral en el futuro. Hay algunas maneras tangibles en que otros pueden apoyar el ministerio allí. Si desea información sobre cómo usted o su iglesia pudiera ministrar a la gente en este país, envíeme un email a thecripplegate@gmail.com.
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