6 Muy Buenas Razones para Considerar Su Pequeña Breve Vida

Por Timj Challies

Nuestras vidas son cortas. Son, en palabras del autor del Eclesiastés, poco más que vapor, polvo soplado por el viento. Sin embargo, el pensamiento mismo que podría consternarle o deprimirle, también puede motivarle. Aquí están algunas bendiciones que serán suyas cuando usted hace una pausa para considerar su pequeña corta vida.

Considerar su pequeña breve vida enfriará su amor por el mundo . Somos fácilmente encantados por las cosas de este mundo, pero somos tan fácilmente engañados por ellas. Como esculturas talladas de hielo, los placeres del mundo están aquí por un momento, luego se van. Con el tiempo tan corto, ¿por qué debemos poner nuestros corazones en cosas que no podemos mantener? Es tonto y derrochador codiciar cosas que no pueden continuar y no proveen verdadera satisfacción. Es ridículo hacer la disposición larga para una estancia corta. Si tenemos suficiente para llevarnos al cielo, tenemos suficiente.

Considerar su pequeña breve vida le humillará. El orgullo es nuestro principal pecado y la humildad la principal gracia de Dios. Para crecer en la piedad debemos hacer morir el orgullo. Considerar nuestra mortalidad ayuda a esta tarea. Después de todo, ¿cómo podemos elevarnos de orgullo cuando sabemos que pronto caeremos a la tumba? Toda persona vestida de mortalidad debe vestirse también de humildad.

Teniendo en cuenta su pequeña breve vida le llevará al arrepentimiento. El arrepentimiento es nuestro deber delante de Dios, pero uno es propenso a demorarlo. Pero cuando pensamos en la incertidumbre del tiempo y su brevedad, veremos el peligro de retrasarlo. Veremos que debemos arrepentirnos hoy en vez de postergar el arrepentimiento en un futuro incierto. ¿Quién sabe si se nos dará la oportunidad?

Considerar su pequeña breve vida le obligará a resistir la tentación. La tentación es la obra principal de Satanás en este mundo y lo hace con habilidad. Así como un granjero se adapta a la semilla al suelo, Satanás adapta sus tentaciones a la persona. Él tentó a Acán con riquezas, a David con belleza, a Pedro con seguridad. Es algo difícil resistir la tentación, pero nos armamos para el conflicto cuando consideramos que nuestras vidas son cortas, que pronto tendremos que rendir cuentas en el juicio.

¿Cómo podemos sucumbir a la tentación por la mañana cuando podemos estar en presencia de Dios por la tarde? ¿Por qué deberíamos pecar hoy cuando podamos morir mañana?

Considerar su pequeña breve vida le traerá consuelo en el dolor. Le consolará en todo tipo de dolor, pero sobre todo el dolor de la pena por los seres queridos que han muerto. La verdadera fe no elimina el dolor, pero sí pone límites. Podemos aún llorar, pero no lloraremos como los que tienen esperanza. Podemos dejar a un lado la amargura del dolor cuando consideramos que el tiempo es corto y que todas nuestras pérdidas pronto serán solucionadas en el cielo.

Considerar su pequeña breve vida le ayudará a valorar la gracia. El tiempo es corto, pero la gracia es para siempre. La gracia no termina con la muerte, sino que se trasplanta en un suelo mejor y más rico. La gracia no es un contrato de arrendamiento que expira sino una herencia que dura para siempre. La gracia durará más tiempo y continuará para siempre en toda la eternidad. Teniendo en cuenta su pequeña breve vida le ayudará a valorar la gracia que la sustenta desde hoy y hacia siempre.

Una de mis actividades favoritas es reescribir parte del trabajo anticuado de los puritanos. Estos puntos se extraen de un sermón fúnebre que predicó Thomas Watson en 1676.