La Importancia del Nacimiento Virginal

por John MacArthur

En este punto de la narración de Mateo, sabemos dos hechos indiscutibles. Uno de ellos, María está embarazada, y dos: José no es el padre del niño. Un tercer hecho crucial viene por medio de la revelación de los ángeles. El niño en el vientre de María fue concebido por el Espíritu Santo. Esto significa que María es todavía virgen.

Pero ¿cuál era el significado del embarazo de María, aunque ella no había tenido relaciones con José o cualquier otro hombre? Es probable que José haya pasado algún tiempo dándole vueltas a esa pregunta si el mensajero divino, no había aclarado de inmediato su declaración con estas palabras “Y dará a luz un hijo, y llamarás su nombre JESÚS, porque él salvará a su pueblo de sus pecados” (Mateo 1:21).

El ángel le dice a José que María en realidad dará a luz un hijo. Y no cualquier hijo, sino Jesús, que “salvará a su pueblo de sus pecados.” Dios escogió el nombre de Jesús Su hijo, porque su significado básico define el propósito fundamental, primordial por la venida a la tierra del Hijo. Jesús es la forma griega del hebreo Josué, Josué o Jehoshua, cada uno significa “Jehová (Yahweh) salvará.” El bebé que María había concebido por obra del Espíritu Santo y daría a luz en el plan de Dios crecería para dar testimonio de la salvación del Padre, y El mismo sería esa salvación. Por su propia muerte sacrificial en la cruz y la resurrección triunfante de la tumba Él salvará a los Suyos –todos aquellos que han sido salvados del pecado al arrepentimiento y reciben fe para abrazar a Su obra redentora.

He aquí la importancia del nacimiento virginal: Puesto que Jesús fue concebido por la agencia del Espíritu Santo, Dios era Su Padre, Su linaje era un santo. Por lo tanto, Jesús fue capaz de salvar a Su pueblo de sus pecados. Esa es la buena noticia de Navidad. ¡Gócese en ella!

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