El Extraordinario Nacimiento de Jesús

por John MacArthur

Los nacimientos extraordinarios no están ciertamente sin precedentes en la historia bíblica. Como parte del Pacto Abrahámico, Dios prometió enviar un hijo a Abraham y Sara (Génesis 17:19-22). Ambos estaban más allá de la edad normal para procrear y se rieron de la idea de ser padres, sin embargo, en última instancia, fueron testigos de la llegada milagrosa de su hijo, Isaac (Génesis 21:1-3). En Jueces 13, un ángel del Señor le dijo a Manoa y su esposa estéril que tendrían un hijo especial. Fiel a las palabras del mensajero celestial, Sansón entró en el mundo y durante un tiempo libró a los israelitas de la opresión de los filisteos.

Samuel, el primer profeta, juez supremo, que ungía reyes, también demuestra en su nacimiento el poder providencial de Dios. El fue la respuesta a las oraciones fieles y perseverantes de su piadosa madre, Ana, que había permanecido hasta entonces sin hijos. La madre de Juan el Bautista, Elizabeth, también era incapaz de tener hijos hasta que Dios en su gracia intervino cuando ella estaba en su sesenta o setenta años y la convirtió en la madre del precursor de Cristo (Lucas 1:15-17, 76-79). Pero ninguno de esos nacimientos especiales fueron tan sorprendentes como el nacimiento virginal del Hijo de Dios, nuestro Señor y Salvador Jesucristo.

A pesar de que el hecho del nacimiento virginal de Jesús es claro y conciso en la Escritura, la mente no convertida de la humanidad pecadora, al igual que todas las doctrinas esenciales de la fe cristiana, se resiste a abrazar la verdad de Su nacimiento único.

En primer lugar, las antiguas mitologías y religiones del mundo falsificaron el nacimiento virginal de Cristo, con una proliferación de historias extrañas y paralelos inexactos. Estas historias socavan y minimizan la singularidad y el profundo impacto del nacimiento de nuestro Señor. Satanás ha propagado muchas leyendas, todas ellas con el propósito de minar la naturaleza del nacimiento de Cristo y engañando a la gente al verlo como un mito o nada excepcional.

Además, la era científica y el surgimiento de las teologías modernas y posmodernas en los últimos dos siglos han erosionado la confianza de muchos creyentes profesantes en la realidad del nacimiento virginal. (Junto con esta tendencia se ha registrado una disminución notable en el porcentaje de “cristianos” que creen en la deidad de Cristo.) Pero tal pensamiento escéptico como es necio y directamente contrario a la enseñanza explícita de los cuatro evangelios, las epístolas, y el histórico testimonio entero de la iglesia primitiva de que Jesús no era otro mas que el Hijo de Dios nacido de una virgen.

En ese contexto, vamos a investigar las cuestiones más importantes sobre el nacimiento de Cristo: ¿Qué enseña la Escritura acerca de Su nacimiento, y por qué es importante? Vamos a encontrar las respuestas en esta serie de artículos de Navidad. ¡No se lo pierda!

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