10 Cosas Que Debes Saber Sobre R. C. Sproul
1. Si R. C. no hubiera sido teólogo, habría sido jugador de béisbol, de los Piratas de Pittsburgh, por supuesto.
R. C. Sproul jugaba al béisbol en un equipo patrocinado. Fue intercambiado por tres jugadores. El anuncio apareció en los periódicos. Pero el periodista deportivo añadió estas palabras: “A Sonny Sproul” -como se le conocía antes de convertirse en R. C.- “le faltaba un bate potencial.” En ese momento estaba en sexto grado y jugaba contra jóvenes de veintitantos años. La primera vez que bateó después del intercambio, se sacó un sencillo. La siguiente vez que bateó, hizo un jonrón. Tenía un bate de verdad. Le ofrecieron una beca de béisbol en la Universidad de Pittsburgh, pero fue al Westminster College con una beca deportiva.
2. R. C. conoció a Vesta, el amor de su vida, cuando él estaba en primer grado y ella en segundo.
Vesta Voorhis se trasladó a la calle siguiente a la de R. C. en la comunidad de Pleasant Hills, situada al sur de Pittsburgh. Entre la casa de Vesta y la de R. C. estaba la escuela primaria. Allí fue donde la vio por primera vez. Ella estaba en segundo grado y él en primero. Desde la primera vez que la vio, supo que iba a casarse con ella.
3. A R. C. siempre le gustó la música, y a los 63 años empezó a tomar clases de violín.
El Dr. Sproul decía a menudo que, además de preocuparnos y perseguir la verdad, la bondad y la justicia, también deberíamos perseguir la belleza. Amaba el arte, la arquitectura, la literatura y el cine. Le gustaba especialmente la música. Tomó clases de piano cuando era joven, pero siempre admiró y aspiró al violín. En 2004, la Capilla de San Andrés (la iglesia en la que sirvió como pastor fundador) abrió las puertas del Conservatorio de San Andrés. R. C. fue uno de los primeros alumnos de violín.
4. El versículo de conversión de R. C. era Eclesiastés 11:3.
Como estudiante de primer año en el Westminster College, R. C. se detuvo en la máquina de cigarrillos del vestíbulo de la residencia, puso su moneda y recibió su paquete de Lucky Strikes. Se dirigía a Youngstown, Ohio, para pasar una noche de fiesta. Sentado en una mesa estaba uno de los capitanes del equipo de fútbol americano. Estaba estudiando su Biblia y le hizo un gesto a R. C. para que se acercara. Estaba leyendo el Eclesiastés y le mostró a R. C. este versículo: “y si el árbol cayere al sur, o al norte, en el lugar que el árbol cayere, allí quedará.” (Eclesiastés 11:3). Ese versículo rebotó en la cabeza de R. C. Renunció a su viaje y regresó a su habitación. Se vio a sí mismo como un árbol muerto, pudriéndose en el suelo. Pidió a Dios que lo salvara.
5. R. C. escribió su tesis de licenciatura sobre Moby Dick.
Para R. C., Moby Dick de Melville es la gran novela estadounidense. En su tesis de licenciatura de 1961, hizo referencia a cómo Ahab pensó en vano que al trazar la Gran Ballena Blanca, podría controlarla y finalmente matarla. Luego, R. C. ofrece esta línea: Acab representa "los puntos de vista religiosos superficiales de la humanidad". Se sembró la semilla del texto clásico del Dr. Sproul, La Santidad de Dios.
6. R. C. fue a los Países Bajos para realizar estudios de doctorado sin saber una sola palabra de holandés.
El primer día de sus estudios, pasó 12 horas leyendo una página de uno de sus libros de texto. Buscó cada palabra y la registró en una tarjeta de 3 x 5 pulgadas. Y al día siguiente, lo volvió a hacer. Y luego otra vez.
7. R. C. tuvo la visión de Ligonier Ministries mientras enseñaba una clase de Cristología en la escuela dominical.
En 1968, el Dr. Sproul enseñaba filosofía y teología en el Seminario Teológico Conwell en el campus de la Universidad de Temple en Filadelfia. El estaba aburrido. Pero los domingos por la mañana impartía una clase en la Iglesia Presbiteriana de Oreland compuesta en su mayoría por profesionales adultos. El curso fue sobre la persona y obra de Cristo. Cuanto más profundo iba, más escuchaban. Comenzó a pensar en dedicar su vida a la enseñanza fuera del aula académica formal.
8. R. C. predicó por primera vez una serie sobre la santidad de Dios en un campamento de Young Life en Saranac Lake, Nueva York, en 1970.
La primera vez que el Dr. Sproul leyó el Antiguo Testamento como un nuevo cristiano, se dio cuenta de que Dios es un Dios que juega para ganar. Eso fue en 1957. Lo había cautivado la santidad de Dios. En Saranac Lake en 1970, ofreció una serie de cinco partes sobre la santidad de Dios. Más tarde, fue una de las primeras series de enseñanza grabadas para cintas VHS en el Centro de Estudios de Ligonier Valley a mediados de la década de 1970. En 1985, publicó el libro. La santidad de Dios es fundamental para Ligonier Ministries, que R. C. Sproul fundó en 1971. La declaración de misión de Ligonier es “proclamar la santidad de Dios en toda su plenitud a tantas personas como sea posible.” Fue el tema central de su enseñanza. Creía que las personas tanto en la cultura como en la iglesia no sabían quién es Dios, es decir, quién es Dios de acuerdo con la autorrevelación de Dios. Como dijo, solo hay un atributo de Dios elevado al tercer grado (Isaías 6: 3).
9. La oración del corazón de R. C. era por un despertar.
Entre los muchos héroes de la historia de la iglesia del Dr. Sproul, destaca Jonathan Edwards. Uno de los sermones de Edwards, “Una Luz Divina y Sobrenatural,” tuvo una influencia particular. En 2014, dirigió una gira de estudio de Ligonier por Nueva Inglaterra. La gira reavivó su deseo de predicar para un despertar. R. C. enfatizó el tema del despertar durante toda su vida. Oraba diariamente por un despertar. En los últimos años de su vida, su celo por el despertar se intensificó.
R. C. Sproul predicó su último sermón sobre Hebreos 2:1-4 el domingo 26 de noviembre de 2017. Su frase final fue esta: “Así que oro con todo mi corazón para que Dios despierte a cada uno de nosotros hoy a la dulzura, la belleza, la gloria del evangelio declarado por Cristo.” El miércoles de esa semana, desarrolló un resfriado que siguió empeorando. Ingresó en el hospital el sábado 2 de diciembre. Al cabo de dos semanas, estaba en la presencia de Dios.
10. La lápida de R. C. dice: “Fue un hombre bondadoso redimido por un Salvador más bondadoso.”
Pocos tienen una sonrisa más amplia que la de R. C. Sproul. Le encantaba reírse y siempre se apresuraba a decir una frase. Disfrutaba con la gente. Conocía de verdad la generosidad de Dios, y eso le impulsaba a servir a la gente. Era conocido por defender la verdad. A lo largo de su vida adoptó muchas posturas en favor de la verdad. Sin embargo, se esforzó por ser amable. Era muy consciente de su propio pecado y de la misericordia y la gracia de Dios al perdonarle. Esta era la causa de su deseo de ser amable. La mayoría de los domingos, en el corto trayecto a casa desde la iglesia, R. C. le preguntaba a Vesta si había sido amable con la gente en el sermón.
Stephen Nichols es el autor de R. C. Sproul: A Life.
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