“¿Robará el Hombre a Dios?” (Malaquías 3:8):
Un Estudio del Diezmo en el Antiguo y Nuevo Testamento
por
ANDREAS J. KÖSTENBERGER Y DAVID A. CROTEAU
SOUTHEASTERN BAPTIST THEOLOGICAL SEMINARY
¿Es obligatorio el diezmo para los cristianos, es decir, dar el diez por ciento de sus ingresos? Este primero de una serie de dos artículos investiga esta cuestión mediante el estudio de todas las referencias al diezmo en la Escritura. La discusión comienza con referencias en el Antiguo Testamento, el diezmo con anterioridad a la promulgación de la ley mosaica, la ley mosaica, y los libros históricos y proféticos. Esto es seguido por un estudio de los tres principales pasajes del Nuevo Testamento sobre el diezmo. El artículo concluye que ninguno de los pasajes del Antiguo ó del Nuevo Testamento legítimamente se puede utilizar para argumentar a favor de la continuación del diezmo en el período del nuevo pacto.
Palabras clave: diezmar, diezmo, el diezmo levítico, fiesta del diezmo, el diezmo de los pobres, el diezmo del bienestar, la Ley mosaica, nuevo pacto, la ley y el evangelio, Malaquías 3:8, Mateo 23:23, Hebreos 7.
La pregunta ominosa, “¿Robará el hombre a Dios?” Se ha pegado en boletines, sobres de ofrendas, y títulos de sermones, y se ha predicado lo suficiente para hacer parecer de su interpretación bastante sencillo. Es cierto que es un pecado robar a Dios lo que es suyo, y por supuesto tenemos que dar nuestros diezmos y ofrendas. Sin embargo, las cuestiones en juego son bastante más complejas de lo que muchos sermones sobre el tema pueden sugerir. La cuestión de si deben dar o no los creyentes de hoy por lo menos el diez por ciento de sus ingresos involucra temas como la continuidad o discontinuidad entre los dos Testamentos, el grado en que la ley mosaica es aún aplicable a los creyentes en el período del nuevo pacto, la relación entre el antiguo y nuevo testamento en general, y la naturaleza de la revelación progresiva y la historia de la salvación.[i]